Post by lechu14 on Nov 29, 2005 10:09:40 GMT -3
EL MEJOR DEL MUNDO
Ninguna duda
Ronaldinho tuvo unanimidad en una encuesta Olé entre técnicos de la Argentina y ganó el Balón de Oro como mejor europeo. "Estoy en un momento que me sorprende a mí".
Seguramente que en el fútbol no hay verdades absolutas. Sí, realidades, situaciones evidentes, más allá de los gustos. Ronaldinho recibió ayer el Balón de Oro de France Football al mejor futbolista europeo, el premio más prestigioso en el Viejo Continente. Venció por buena diferencia, en los votos de periodistas especializados. También aplastó en una encuesta que realizó Olé entre entrenadores de nuestro medio: lo eligieron los 24 consultados (ver La selección...). Y hace menos de un mes había ganado la elección por Internet de la UEFA, entre 1.200.000 votos. Diez días atrás conmovió al Planeta Fútbol con dos golazos y una actuación de lujo ante el Madrid, logrando que el estadio Bernabeu lo aplaudiera, algo que sólo Cruyff y Maradona habían conseguido en territorio blanco con la camiseta del Barcelona. En mayo, con el Barcelona, obtuvo la Liga. Antes, el FIFA World Player 04 (votado por entrenadores y capitanes de selecciones), y es una fija que en diciembre repite. No hay ninguna duda: Ronaldinho, 25 años, de profesión futbolista y malabarista por pasión, de "novio con la pelota", es el mejor jugador del mundo. Si bien todo es opinable, parece que en esto hay poco debate.
Crack catalán. La unanimidad la consiguió en el Barcelona. Era él o Beckham, la figura con golpe mediático que Joan Laporta necesitaba en el arranque de su presidencia. Le tocó al brasileño por 25 millones de euros. Así, también había pasaje de salida para Riquelme del Camp Nou hacia el Villarreal. Desde entonces, aunque tuvo algunos baches en su nivel, vive un romance con los culé. "Si Ronaldinho ríe, el Barcelona puede estar tranquilo", dijo el técnico Frank Rijkaard. "Sólo es necesario darle el balón, el hace lo demás", opinó su compañero Deco. "Es un jugador que hace a la vez acciones individuales y colectivas, a la imagen del Barsa. Los espectadores disfrutan del espectáculo, es muy bueno para el fútbol que él haya ganado este trofeo", elogió Luis Figo, ex Madrid y actual Inter. "El Barsa es un equipo que le permite tener el balón y demostrar su calidad. No tiene que hacer desgaste en otros trabajos como les pasa a algunos jugadores del Real Madrid", analizó Cruyff.
Fantasía asegurada, muchas veces contundente, es capaz de mirar a un lado y pasársela a un compañero que está a su espalda. Sabe con la pelota parada y en una baldosa te puede destrozar, con un amague para acá y otro para allá. Belleza...
Además, es carismático y sabe explotar su imagen, está en un club de enorme repercusión internacional, su selección es candidata a repetir en Alemania 06 el título del 2002... Todo le cierra.
Claro, antes hubo etapas grises. Por ejemplo: cuando a los 21 años pasó del Gremio de Porto Alegre al PSG estuvo cuatro meses colgado por un reclamo económico del club brasileño al francés. Debió intervenir la FIFA. Incluso en Francia, aún con sus lujos, sólo ganó la Copa Intertoto, un torneo menor. Al final, el PSG decidió venderlo por una pelea con el técnico Luis Fernández.
Sus comienzos. Empezó a destacarse en un torneo Sub 13 en Alegrete, de su país, y fue campeón Mundial Sub 17 en 1997. Ahí Gremio rechazó una oferta de siete millones de euros del PSV Eindhoven.
Su explosión en la mayor ocurrió en 1999. El técnico Luxemburgo lo llamó tras dar de baja al indisciplinado Edilson y en la Copa América de Paraguay debutó con un golazo, sombrero y gambeta incluidos, ante Venezuela (7-0). Luego, llegó la vuelta olímpica del 2002, con Ronaldo y Rivaldo con mayor chapa. Hoy el único intocable es él.
Se maneja en familia. Roberto, su hermano (futbolista frustrado por lesión), es su representante. Deisy, su hermana, le maneja la agenda. De todo lo demás se encarga su madre Miguelinha.
Ayer le dijo al diario El País: "Ultimamente me sale todo. Estoy en un momento que me sorprende incluso a mí".
cortesia diario olé 29/11/05
Ninguna duda
Ronaldinho tuvo unanimidad en una encuesta Olé entre técnicos de la Argentina y ganó el Balón de Oro como mejor europeo. "Estoy en un momento que me sorprende a mí".
Seguramente que en el fútbol no hay verdades absolutas. Sí, realidades, situaciones evidentes, más allá de los gustos. Ronaldinho recibió ayer el Balón de Oro de France Football al mejor futbolista europeo, el premio más prestigioso en el Viejo Continente. Venció por buena diferencia, en los votos de periodistas especializados. También aplastó en una encuesta que realizó Olé entre entrenadores de nuestro medio: lo eligieron los 24 consultados (ver La selección...). Y hace menos de un mes había ganado la elección por Internet de la UEFA, entre 1.200.000 votos. Diez días atrás conmovió al Planeta Fútbol con dos golazos y una actuación de lujo ante el Madrid, logrando que el estadio Bernabeu lo aplaudiera, algo que sólo Cruyff y Maradona habían conseguido en territorio blanco con la camiseta del Barcelona. En mayo, con el Barcelona, obtuvo la Liga. Antes, el FIFA World Player 04 (votado por entrenadores y capitanes de selecciones), y es una fija que en diciembre repite. No hay ninguna duda: Ronaldinho, 25 años, de profesión futbolista y malabarista por pasión, de "novio con la pelota", es el mejor jugador del mundo. Si bien todo es opinable, parece que en esto hay poco debate.
Crack catalán. La unanimidad la consiguió en el Barcelona. Era él o Beckham, la figura con golpe mediático que Joan Laporta necesitaba en el arranque de su presidencia. Le tocó al brasileño por 25 millones de euros. Así, también había pasaje de salida para Riquelme del Camp Nou hacia el Villarreal. Desde entonces, aunque tuvo algunos baches en su nivel, vive un romance con los culé. "Si Ronaldinho ríe, el Barcelona puede estar tranquilo", dijo el técnico Frank Rijkaard. "Sólo es necesario darle el balón, el hace lo demás", opinó su compañero Deco. "Es un jugador que hace a la vez acciones individuales y colectivas, a la imagen del Barsa. Los espectadores disfrutan del espectáculo, es muy bueno para el fútbol que él haya ganado este trofeo", elogió Luis Figo, ex Madrid y actual Inter. "El Barsa es un equipo que le permite tener el balón y demostrar su calidad. No tiene que hacer desgaste en otros trabajos como les pasa a algunos jugadores del Real Madrid", analizó Cruyff.
Fantasía asegurada, muchas veces contundente, es capaz de mirar a un lado y pasársela a un compañero que está a su espalda. Sabe con la pelota parada y en una baldosa te puede destrozar, con un amague para acá y otro para allá. Belleza...
Además, es carismático y sabe explotar su imagen, está en un club de enorme repercusión internacional, su selección es candidata a repetir en Alemania 06 el título del 2002... Todo le cierra.
Claro, antes hubo etapas grises. Por ejemplo: cuando a los 21 años pasó del Gremio de Porto Alegre al PSG estuvo cuatro meses colgado por un reclamo económico del club brasileño al francés. Debió intervenir la FIFA. Incluso en Francia, aún con sus lujos, sólo ganó la Copa Intertoto, un torneo menor. Al final, el PSG decidió venderlo por una pelea con el técnico Luis Fernández.
Sus comienzos. Empezó a destacarse en un torneo Sub 13 en Alegrete, de su país, y fue campeón Mundial Sub 17 en 1997. Ahí Gremio rechazó una oferta de siete millones de euros del PSV Eindhoven.
Su explosión en la mayor ocurrió en 1999. El técnico Luxemburgo lo llamó tras dar de baja al indisciplinado Edilson y en la Copa América de Paraguay debutó con un golazo, sombrero y gambeta incluidos, ante Venezuela (7-0). Luego, llegó la vuelta olímpica del 2002, con Ronaldo y Rivaldo con mayor chapa. Hoy el único intocable es él.
Se maneja en familia. Roberto, su hermano (futbolista frustrado por lesión), es su representante. Deisy, su hermana, le maneja la agenda. De todo lo demás se encarga su madre Miguelinha.
Ayer le dijo al diario El País: "Ultimamente me sale todo. Estoy en un momento que me sorprende incluso a mí".
cortesia diario olé 29/11/05